Desde Rafá, la situación en la Franja de Gaza ha empeorado. Israel intensificó sus ataques aéreos, dejando a edificios residenciales en ruinas y sepultando a familias completas bajo los escombros.
Según datos proporcionados por el Ministerio de Salud de Gaza, más de 750 personas han perdido la vida en las últimas 24 horas, incluyendo a más de 300 niños. Estas cifras, indicadas como las más altas en un solo día desde el inicio del conflicto hace casi tres semanas, fueron confirmadas por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.
Israel ha justificado estos ataques acusando a Hamas de operar en medio de civiles. Afirmaron que sus ofensivas han matado a combatientes y destruido objetivos militares. Paralelamente, desde Gaza se han lanzado continuos cohetes hacia Israel.
La agencia noticiosa AP, entre otros medios, ha capturado impactantes imágenes de rescatistas buscando sobrevivientes y desenterrando cuerpos, incluidos niños, de entre las ruinas. Algunos edificios derrumbados han ocasionado la muerte de decenas en un solo incidente. Una tragedia reportada por el Ministerio de Salud indicó que dos familias perdieron a 47 miembros en un solo edificio en Rafá.
A 19 días del inicio de la guerra, las cifras son devastadoras: más de 6,500 palestinos han muerto y 16,297 han resultado heridos. UNICEF reportó que, en promedio, más de 400 niños palestinos son afectados diariamente por los bombardeos. En Israel, mil 400 personas han fallecido, en su mayoría civiles, desde el inicio de los ataques de Hamas.
La situación humanitaria en Gaza es crítica. Con hospitales al borde del colapso, médicos denuncian la falta de combustibles y medicamentos. Israel, con la intención de «aniquilar» a Hamas, mantiene un estricto asedio en la región, con un posible plan de invasión en mente.
La agencia de la ONU para refugiados palestinos ha hecho un llamado urgente, advirtiendo que sin entregas inmediatas de combustible, tendrán que recortar drásticamente sus operaciones.
Paralelamente, en Cisjordania, más de cien palestinos han perdido la vida debido a operaciones del ejército israelí desde el inicio del conflicto.
La escalada de violencia en la región se produce tras una incursión sin precedentes de Hamas, que resultó en ataques desde múltiples frentes, cruzando la frontera fortificada de Israel. En respuesta, Israel ha incrementado sus bombardeos, restringido el acceso a suministros esenciales y prometido un asedio total a la Franja de Gaza. Esta tensión ha llevado a un número alarmante de bajas y una creciente escasez de suministros esenciales.